Por fin llega el verano, sinónimo de vacaciones, sol, playa...y calor. Aquí os traigo una receta muy saludable de los míticos polos veraniegos, y lo mejor de todo: es muy sencillo de preparar. Anímate a prepararlos sola, con tu pareja, con amigos, con tu familia...
Necesitas: molde para hacer polos, fruta fresca (la que más te guste) y ¡mucha imaginación!
En primer lugar, trocearemos la fruta que hemos elegido para posteriormente triturarla en una batidora. No importa si el resultado es espeso, pero si quieres que sea más líquido añade agua.
Si hemos elegido varias frutas, tenemos dos opciones:
1. Mezclarlo todo y hacer los polos de ese sabor.
2. Hacer el polo por capas.
La primera opción es la más sencilla: sólo tienes que rellenar el molde con el zumo y congelarlo durante 3 o 4 horas. A medio proceso de congelación, introduce el palo del polo.
El polo por capas es algo más trabajoso, pero queda muy bonito. Si quieres mezclar tres zumos, divide el polo en tres partes iguales (si son más divídelo en x partes repartidas equitativamente) y rellena un tercio con el zumo que quieras, mételo al congelador y déjalo reposar unas 2-3 horas. Haz lo mismo con cada uno de los jugos. Introduce el palo del polo 1 hora y media después de haber vertido la última bebida.
Recuerda que puedes añadir trocitos de fruta o cubrirlos con tu chocolate preferido. ¿Cómo recubrir mis polos con chocolate? Prepara chocolate a la taza o funde algunas pastillas de chocolate y sumerge los helados en el chocolate fundido y caliente. Debes de hacerlo rápido e inmediatamente has de meterlos en el congelador, si no el resultado se echará a perder.
Mis helados favoritos son los de cereza. Aquí os dejo una foto:
¿Cuáles son tus polos favoritos?
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